Entre un vidrio oscuro, distancias que separan igual
estas aquí, entre mis ojos, tus ojos, tu mirada la mía,
sólo es energía, unida a la empatía que nos moviliza.
Sí, es así, hoy comprobé que
tú mirada necesitaba,
ese brillo que brinda
el resplandor de mi amor puro,
sincero, sublime, que llega a la profundidad de tu ser,
pues navegaba la esencia del frenesí y la ensoñación.
Así siento, así cada
espacio de mí, te necesita y te llama,
te reclama, mientras, tal vez, olvidas, disimulas, escapas.
La vida, el destino,
dirá cuál será nuestra realidad, cuál.
Si me amas, estarás junto a mí, te aseguro sabré esperar.
Más solamente espero ese ideal soñado, esperanzado,
no una sombra,
tampoco lo material, finito del cuerpo.
Tal vez, es etéreo e
incorpóreo e infinito cada deseo,
pedido. Imposible, encontrarlo, quiero seguir volando.
Parecen contradicciones, solamente son combinaciones,
debo superar la rutina de la vida. Entre la realidad y la
fantasía, me perfecciono. Transporto y elevo, escapo,
vivo, supero,
confirmo, espero, lo mejor, para los
dos.
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